La huella que ha permitido la identificación de uno de los presuntos autores del asesinato de Juan Holgado, 20 años después del crimen, forma parte de un grupo de catorce que fueron analizadas varias veces sin éxito en el pasado y que ahora vuelven a investigarse, junto a restos de ADN.
"O no se hacía o se hacía sin ganas", ha explicado a Efe José Miguel Ayllón, abogado de Francisco Holgado, conocido como "Padre Coraje" por la perseverancia con la que ha reclamado la investigación del crimen de su hijo, cosido a puñaladas la madrugada del 22 de noviembre de 1995 cuando asaltaron la gasolinera de Jerez de la Frontera (Cádiz) en la que el joven, de 27 años, trabajaba.
Cuando faltaba un mes para cumplirse los veinte años del crimen, plazo para la prescripción de los delitos, el juzgado de instrucción número 1 de Jerez aceptó hacer lo que el abogado de la familia del joven venía pidiendo insistentemente desde hacía años: que se repitieran estas pruebas.
Coincidió con el último esfuerzo que el "Padre Coraje" hizo para que el caso no quedara cerrado, una marcha a pie desde Jerez a Madrid, donde se reunió con varias autoridades, entre ellas el ministro de Justicia, Rafael Catalá.
El pasado 20 de octubre el propio ministro informó de que el juzgado había solicitado nuevas pruebas periciales y que el Ministerio de Interior las iba a practicar a través de la Guardia Civil, "a la mayor diligencia posible" porque estaba "muy cerca" la prescripción del crimen.
"Era increíble que no dieran resultados, por eso insistíamos tanto", explica el abogado del "Padre Coraje" mientras apuntala su teoría señalando que la primera huella dactilar de la que se conocen los resultados, corresponde a A.M.R-B, un toxicómano del barrio de La Constancia de Jerez fallecido hace nueve años y "fichado" porque tenía varios antecedentes policiales por diversos delitos.
La huella fue hallada sobre la sangre de la víctima en un tetabrick que los asaltantes pidieron al empleado de la gasolinera antes de asesinarle a cuchilladas.
Como pedía el abogado del "Padre Coraje", la Guardia Civil ha sido la encargada de repetir ahora los análisis, en un caso cuya investigación ha llevado siempre la Policía Nacional, que nunca encontró pruebas concluyentes sobre a quien correspondían esas huellas dactilares.
Según el abogado, hay trece huellas dactilares más que quedaron en la escena del crimen, en el mostrador o en la caja registradora y restos de ADN, hallado en un cristal de la puerta de la gasolinera, que los asaltantes rompieron para huir del lugar y con el que alguno de ellos se hirió.
Unos indicios que el abogado aventura que pueden traer "nuevas noticias" sobre este caso, porque tanto la Policía como los forenses certificaron que Juan Holgado fue asesinado por varias personas, con varias armas.
El juzgado ya ha citado a declarar a varios testigos, del entorno de la persona identificada, para el próximo día 30, dentro de unas pesquisas que han dado un vuelco a este caso, por el que fueron juzgados y absueltos por falta de pruebas cuatro acusados, en una sentencia que confirmó el Tribunal Supremo.
"Sentimos cierta satisfacción. Por fin se alcanza algo de Justicia, por fin se sabe algo de la verdad y eso ayuda a recuperarse a la familia de Juan Holgado. Está llegando algo de Justicia, no es rápida ni plena, pero es de agradecer", dice el abogado que, además, es presidente de la Asociación Nacional de Víctimas de Delitos Violentos.
Como presidente de esta asociación asegura que hay "muchos casos sin resolver", algunos porque "no ha habido suerte" y otros, como el de Juan Holgado, porque "no se ha investigado bien".
"Esa ha sido la lucha de Francisco Holgado", señala para recordar que el pasado octubre el "Padre Coraje" marchó a pie desde Jerez hasta Madrid para pedir "que se hiciera Justicia no sólo solo para su caso, para todos" y que estos delitos de sangre tan graves no prescriban.