El coordinador provincial de IU en Cádiz, Fernando Macías, a raíz de los desórdenes públicos ocurridos en la capital gaditana a finales de septiembre durante la presentación de un libro sobre José Antonio Primo de Rivera, ha dicho que no puede estar a favor de un altercado y que "las ideas hay que combatirlas con ideas", si bien ha reflexionado que en ocasiones "es el pueblo quien tiene que ilegalizar los actos con su presencia".
En declaraciones a Europa Press, Macías ha defendido que "la democracia es democracia" y que "se hable de lo que se quiera". No obstante, ha señalado que "hablar y recuperar figuras que han sido dictadores y que han traído historia negra en este país, eso no pasa en ningún otro país europeo. De hecho, se hace en Alemania y es directamente delito, pero aquí no tenemos una legislación tan avanzada".
Ha apuntado que es cierto que hay una Ley de Memoria Histórica, aunque "hay determinados símbolos y determinadas figuras que a día de hoy no ha tenido valor de condenarlas el Congreso porque no ha habido voluntad política".
Ha añadido que "debería ser un debate cerrado en este país, pero continua abierto porque nunca logró cerrarse", lamentando que, por ejemplo, "todavía levante susceptibilidades que se abra una fosa común para darle dignidad a personas que fueron exterminadas durante la dictadura y antes de la dictadura".
"HAY QUE APLICAR LA LEY DE MEMORIA HISTÓRICA"
En opinión de Macías, "lo que hay que hacer es aplicar la ley. Es decir, no se puede ir en contra de la Ley de Memoria Histórica y, por tanto, no se pueden celebrar determinados actos, pero tiene que ser un juez el que diga eso".
En cualquier caso, ha reflexionado que "los partidos políticos los ilegaliza la gente con sus votos y los actos públicos y políticos, independientemente del cariz que tengan, los tiene que ilegalizar el pueblo también".
Desde un planteamiento "absolutamente personal", Fernando Macías ha dicho que "se presenten los libros que se tengan que presentar", agregando que lo que hay que hacer es "que nuestro mensaje político sea más potente que el de aquellos que van en contra de la democracia y contra la vida de los seres humanos, porque al fin y al cabo estamos hablando de genocidas y de asesinos". Asimismo, ha abogado por "hacer políticas didácticas desde el respeto y desde una mirada absolutamente crítica".
Desde su punto de vista, "si quiere presentar un libro sobre Primo de Rivera hágalo, pero aténgase a las consecuencias". En este punto, ha comentado que le da la impresión de que "se relaja mucho en este país la aplicación de la ley contra actos que son de apología del terrorismo, porque defender a un dictador no deja de ser eso", y, sin embargo, "parece que la izquierda siempre está mirada con lupa en el momento en el que se sale del tiesto". Por ello, ha incidido en que "esto habría que hacerlo mirar y exigir evidentemente que se cumplan las leyes".
Finalmente, ha reiterado que no está de acuerdo con los enfrentamientos entre grupos y ha insistido en que "las ideas hay que combatirlas con ideas, y con solvencia y coherencia sobre lo que están planteando otros".