El bebé de siete meses de edad presuntamente agredido por sus padres en Sevilla continúa en estado crítico en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital Virgen Macarena de Sevilla, donde ingresó ayer en situación de muerte cerebral.
Fuentes del centro sanitario han comunicado a Efe que el bebé no ha experimentado mejoría desde su ingreso, sufriendo, entre otras lesiones, fractura de huesos del cráneo así como otras en los globos oculares, que le han sido provocadas al haber sido zarandeado con violencia.
Mientras, los padres han pasado esta mañana a disposición judicial, una pareja de 18 y 19 años de edad, responsables de un bebé que nació con solo un kilo y medio de peso y de forma prematura mientras su madre estaba en la cárcel, por lo que fue trasladado a un centro sanitario.
Cuando la madre salió en febrero de prisión, le entregaron el bebé, que ya estaba recuperado, aunque los padres no lo llevaron a todas las consultas de pediatría que le correspondían, al parecer por los moratones que tenía en el cuerpo, según las fuentes.
Por su parte, la consejera de Igualdad y Políticas Sociales de la Junta, María José Sánchez Rubio, ha adelantado hoy que el Gobierno regional va a intervenir como "entidad pública competente en materia de protección de menores", en este caso y ha condenado todos los "malos tratos", pero especialmente los que se producen en el ámbito de los menores, por lo que este caso le parece "absolutamente rechazable".
"Ninguna tolerancia. Vamos a intervenir como entidad pública competente en materia de protección de menores", ha adelantado la titular de Políticas Sociales, que esperará a que el menor "salga adelante y se supere el problema de salud" para activar el protocolo.
A su juicio, "es un tema que hay que analizar en profundidad desde el ámbito de la judicatura y de la fiscalía de menores", pero, mientras tanto, lo que "se está haciendo fundamentalmente es salvarle la vida" al bebé.
