El Grupo Municipal del Partido Popular han recordado hoy que “el único que supeditó su futuro y el de las cuentas municipales al hotel del Estadio fue Navarro, cuando manifestó en mayo del pasado año que si llegado el 31 de diciembre no hemos vendido el hotel a mí se me puede tachar de iluso, de no tener ni idea de economía y de no ser responsable con el dinero público”. Si sumamos esta condición que él mismo se puso al hecho de que mintiera de manera descarada sobre la reducción de la deuda en los seis primeros meses de su gestión, cuando según las cuentas generales aprobadas aumentó la misma en 22 millones, solo le queda un camino y él sabe cuál es”.
Los populares indicaron que ha sido el empecinamiento de Navarro y de Podemos de elaborar unos presupuestos en los que se asignó el dinero de la venta del hotel a gasto no elegible el que ha provocado que los presupuestos de 2016 estén en el TSJA con un informe demoledor del Tribunal de Cuentas en el que se habla claramente de incumplimiento de la regla de nivelación presupuestaria: “lo dijimos hasta la saciedad, las cuentas eran ficticias. Lo ha demostrado el Tribunal de Cuentas y sobre todo el decretazo del alcalde para prorrogar unos presupuestos en 2017 donde ha dejado a cero partidas vitales para la ciudad”.
No se ha negado la urgencia al pleno
El Grupo Popular también quiso aclarar que en la Comisión Informativa previa al pleno del viernes donde se ha abordado la propuesta del Gobierno Local de instar a Zona Franca a ejercer una opción de compra sobre los módulos del Estadio Carranza no se ha votado en contra del carácter de urgencia: “ya no sabemos si es que el alcalde es aficionado compulsivo a la mentira o es que lleva dos años sin enterarse de nada. El reglamento impide que las propuestas de carácter económico se lleven a pleno sin informe de Intervención. No hemos impedido que vaya por urgencia, hemos puesto de manifiesto lo que dice el reglamento y el alcalde ha retirado la propuesta. Podría haberla llevado a Pleno, pero sabía que allí mismo decaería sin votarla siquiera por no cumplir el reglamento”.
“El alcalde no puede estar dos años aprendiendo a llevar una propuesta a pleno y, sobre todo no puede estar dos años diciendo que tienen una fila de compradores esperando y salir a cinco meses de que acabe 2017 pidiendo a la Zona Franca que vuelva a sacarle las castañas del fuego como hizo en diciembre de 2015, cuando tuvimos que meterle prisa para firmar la venta del bajo y primera que es lo que venía en el acuerdo: algo que le salvó el presupuesto de 2015 de un desastre mayor del que cometieron” remarcaron desde las filas populares.
El grupo mayoritario de la oposición municipal pidió a los socialistas que “si de verdad no quieren ser responsables de este desastre económico en el que nos han metido tomen decisiones importantes respecto a la ciudad y dejen de buscar el beneficio partidista presentando propuestas como la reprobación de un concejal que lo es porque ellos lo colocaron en el gobierno. La reprobación no es solo necesaria sino que se queda corta”.