Cacerolas, tambores, megáfonos, bocinas y pancartas son las armas de 32 trabajadoras para reclamar el pago de sus nóminas. Las limpiadoras de la empresa subcontratada Tempo Facility Services por la Agencia Tributaria de la provincia de Málaga llevan cuatro meses sin cobrar y tampoco pueden regular su situación después de “la fuga del empresario con el dinero de sus nóminas”.
Desde Comisiones Obreras han denunciado lo ocurrido, al mismo tiempo que han criticado la “inacción de la Administración”.
Los problemas comenzaron en los meses de verano con “atrasos en sus nóminas”, ha recordado Pilar Cortés, secretaria de Negociación Colectiva y Acción Sindical de CCOO. “En el mes de septiembre dejan de cobrar, siendo el último pago que tienen de Tempo en el mes noviembre y les pagan hasta octubre”, ha dicho.
Asimismo, esto da lugar a que estas empleadas llevan sin cobrar noviembre, diciembre y enero; a lo que hay que sumar, ha explicado Cortés, el mes de febrero porque como “no tienen el certificado de empresa para realizar la demanda de empleo”.
Además, ha hecho hincapié en que “están fuera de su centro de trabajo”, pero en “tierra de nadie”, ya que no pueden regularizar su situación ante la falta de dicho certificado de empresa.
“Ellas tienen su documentación entregada, pero si no llevas un certificado de empresa en el que ponga la situación en la que tú estás no pueden cobrar nada”, ha señalado.
Todo esto ha ocasionado graves problemas en la estabilidad económica de las familias de estas limpiadoras: “Hay madres separadas con hijos pequeños, viudas; luego cuando estas trabajadoras tengan que hacer su declaración de Hacienda o no puedan pagar una hipoteca a ver quién viene a rescatarlas”, ha reivindicado.
Una situación que también ha llevado a algunas limpiadoras a iniciar un “tratamiento psiquiátrico, porque tienen menores a su cargo y sin una nómina cómo pagan la luz, el agua”, ha subrayado la sindicalista.
Haciendo referencia a la afluencia a las concentraciones, ha indicado que “hay días que solo tengo un puñaito aquí, porque el resto se están dedicando a limpiar en casas sin seguro y sin nada, echando horas para poder llevar algo a su casa”. Del mismo modo, ha incidido en que han pasado de “tener un trabajo, a verse en la calle y sin cobrar por nóminas y, en vez de poder prosperar, se tienen que buscar un trabajo con condiciones laborales inferiores”.
Por otra parte, ha añadido que Tempo además ha dejado “una deuda tremenda con la Seguridad Social”, por lo que la nueva subcontrata que se encargue del servicio de limpieza deberá “cubrir las nóminas y tendrá que depositar el coste de la deuda a la seguridad social, pero con el miedo de no saber si se me va a devolver la parte pagada que no es mía, después de que se fraccione”.
“Lo que yo temo es que la empresa que se presente, porque lo que van a hacer es un pequeño contrato puente hasta que salga la licitación, dentro de cuatro meses diga que no puede volver a pagar a las trabajadoras y deje otra vez Seguridad Social colgada”, ha explicado, lo que agravaría más el problema.
Así, Cortés ha concluido pidiendo que “todas las administraciones públicas se pongan de acuerdo, para que estos casos no se den más”, lo que supondría llevar a cabo “un control exhaustivo en una licitación que se concede, para que haya un riesgo para el trabajador de la subcontrata”.
“Las administraciones públicas tienen que hacerle un seguimiento a las empresas que contratan, tanto en cuantía monetaria de trabajadoras como Seguridad Social”, ha concluido.
Las concentraciones de las trabajadoras de limpieza continuarán hasta la solución definitiva del conflicto laboral.