Castro encabezó la revolución que derribó el 1 de enero de 1959 al dictador Fulgencio Batista y se mantuvo como líder indiscutible de la misma hasta que el 31 de julio de 2006 una grave dolencia intestinal lo alejó de todos sus cargos, que fueron asumidos por su hermano menor, Raúl Castro.
En febrero de 2008 dejó de ser oficialmente el presidente y en abril pasado fue sustituido también por su hermano como primer secretario del Partido Comunista de Cuba (PCC), el último cargo de máxima responsabilidad que formalmente todavía ocupaba.
Muchos en la isla se preguntan todavía sobre el verdadero rol y alcance de la influencia de un Fidel Castro que insiste en que sólo es un “soldado de las ideas”.
“Mientras tenga fuerzas para hacerlo, y afortunadamente se encuentra en plenitud de su pensamiento político, desde su modesta condición de militante del partido y soldado de las ideas, continuará aportando a la lucha revolucionaria y a los propósitos más nobles de la Humanidad”, ha señalado Raúl Castro.
El general Castro (80 años) quiere sacar a Cuba de la penuria que arrastra desde hace décadas.