La Guardia Civil ha desarticulado un punto de venta de droga en la pedanía de Patría, en Vejer de la Frontera, deteniendo a sus ocho responsables e incautando diversas cantidades de droga que supuestamente los detenidos tenían listas para su distribución, así como dinero en efectivo, diverso material para la manipulación de la droga, cuatro turismos, varios ciclomotores y varias armas de aire comprimido.
Según ha informado la Benemérita en un comunicado, el operativo se inició cuando los guardias civiles de Barbate tuvieron conocimiento de que en un domicilio de Patría se concentraban numerosas personas conocidas en la zona por su adicción a las drogas, lo que generaba una sensación "de gran inseguridad" entre los vecinos de la zona.
Ante esta situación, los agentes establecieron un dispositivo de vigilancia sobre el lugar, dando como resultado la interceptación en diversas ocasiones de consumidores de droga a los que se les intervinieron pequeñas cantidades de hachís, marihuana o cocaína, que las habían adquirido en el domicilio controlado, siendo denunciados por infracciones a la Ley de seguridad ciudadana.
Por tal motivo, agentes del Puesto Principal de Barbate, apoyados por el Servicio Cinológico y miembros de la unidad de control de masas de la Guardia Civil (GRS-2), tras obtener el correspondiente mandamiento judicial de entrada y registro, procedieron a realizar un registro domiciliario en la vivienda controlada.
Han sido incautadas 14 plantas de marihuana, 12 dosis de cocaína y hachís listas para su venta, diverso material para la manipulación y adulteración de la droga, elementos para la recolección de la marihuana, dinero en metálico, así como cuatro turismos, diversos ciclomotores, armas de aire comprimido, y diversos efectos susceptibles de proceder de diversos robos y que podrían ser usados como pago para la compra de estupefacientes.
Por tales hechos han sido detenidos y puestos a disposición del titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número dos de Barbate los ocho supuestos responsables del punto de venta de drogas, de entre 49 y 20 años de edad.
