La Guardia Civil de Cádiz ha desarrollado un operativo de control sobre la venta ilegal de tabaco de contrabando en Jerez y que ha afectado a todo tipo de establecimientos públicos tales como bares, kioskos o restaurantes, entre otros..
Como consecuencia del operativo se han intervenido 1.490 cajetillas de tabaco de diferentes marcas comerciales, realizado más de 30 inspecciones y levantado 18 actas por infracción a la Ley 12/1995 de Represión del Contrabando. Los propietarios de estos establecimientos tendrán que hacer frente por tanto a sanciones que oscilarán entre 600 y 3.000 euros, más el pago del valor del género decomisado y los impuestos que generarían dichas cajetillas. Además de estas sanciones económicas, los denunciados podrán ser sancionados con el cierre del establecimiento por un periodo de cuatro a 29 días, todo ello en función de la cantidad decomisada.
La Guardia Civil de Cádiz está desarrollando un dispositivo especial encaminado a la lucha contra la venta ilegal de tabaco de contrabando, sobre todo del procedente de Gibraltar, cuyo comercio ilegal está poniendo en serios apuros a los Expendedores de Tabaco y Timbres, que son los primeros en solicitar y agradecer este tipo de operativos tras haber visto disminuir sus ventas hasta el punto de que en muchos casos han tenido que cerrar sus puertas.
Por este motivo, los guardias civiles de la Patrulla Fiscal y Fronteras (PAFIF) de Sanlúcar de Barrameda han inspeccionado de forma masiva distintos establecimientos públicos susceptibles de dedicarse a este tipo de actividad ilegal.
En el operativo, los agentes se han enfrentado a la picaresca y sofisticación de quienes se dedican a esta venta, habiendo encontrado el género decomisado en los más diversos escondrijos, tales como dobles fondos, cubos de basura, frigoríficos desconectados, televisores vaciados previamente, cajas de leche e incluso maleteros de vehículos aparcados frente a los establecimientos que actuaban como almacenes.