Los socios de Megaupload temían que Kim Dotcom se fugara con el dinero en caso de que la empresa afrontara problemas, reveló hoy la fiscalía durante el juicio de extradición a EE.UU. que afrontan en Nueva Zelanda.
Christine Gordon, la fiscal neozelandesa que representa a Estados Unidos, leyó una serie de conversaciones por Skype y correos electrónicos que muestran que los acusados sabían desde un principio de las actividades criminales del portal, según la agencia NZN.
En uno de los diálogos, Bram van der Kolk le cuenta a Mathias Ortmann, ambos socios de Dotcom que también están siendo procesados, que "está creciendo" la posibilidad de afrontar mayores problemas.
"El asunto es cuándo. No hay salida. Kim se agarrará los últimos pares de millones y se esconderá", añade la conversación.
Gordon también leyó docenas de extractos de mensajes en los que Dotcom calificaba al grupo de "maléficos" o a Van der Kolk mientras afirmaba que siempre viviría de la "piratería".
Dotcom, Ortmann y Van der Kolk afrontan junto a Finn Batato, otro exdirectivo de Megaupload, un juicio ante un tribunal de Auckland para considerar su extradición a Estados Unidos, que lo requiere por supuestos delitos de piratería informática, crimen organizado y lavado de dinero.
Estados Unidos cree que Megaupload, que llegó a tener 50 millones de usuarios y a representar el 4 por ciento del tráfico mundial de Internet, causó más de 500 millones de dólares en pérdidas a la industria del cine y de la música al alojar supuestamente material pirata.
Dotcom y sus socios han sido acusados por el FBI estadounidense de haberse lucrado en este negocio con unos beneficios de unos 175 millones de dólares.
El proceso de extradición se ha postergado diez veces desde que Dotcom y sus socios fueran detenidos en enero de 2012 en el marco de un gran operativo internacional orquestado por el FBI que supuso el cierre de Megaupload, la congelación de sus cuentas y la incautación de sus bienes.
Hasta ahora, el único condenado de los siete miembros de Megaupload acusados en Estados Unidos es el programador estonio Andrus Nomm, quien en febrero pasado fue sentenciado en ese país a poco más de un año de cárcel tras admitir su participación en la violación de los derechos de autor.