Aunque los empresarios portuenses tendrán que esperar a la semana próxima para poder hacer balance de si las expectativas que tenían puestas en la Semana Santa se han cumplido o no, es cierto que la sensación de estos primeros días de la Semana Mayor deja buen y mejor sabor de boca en los empresarios.
Sí es cierto que los establecimientos a pie de playa y en Puerto Sherry que se vieron afectados por el temporal que azotó a la ciudad han sufrido un duro revés, ya que los primeros cuatro o cinco días de esta Semana Santa, desde el Domingo de Ramos, están posibilitando que la visita a las playas y a los chiringuitos y establecimientos en la costa hayan generado que los que están abiertos al público estén haciendo “buenas ventas, porque los días han acompañado. Hemos podido abrir como teníamos previsto y ha sido mucha la gente que ha venido, sobre todo el Domingo de Ramos, y esperamos que llegado el puente, también, que es cuando más gente coge sus vacaciones”, explica un comerciante de la zona de playa.
De hecho, ha habido muchos locales con los libros de reservas colmatados en pocas horas, “lo que quizás no veíamos en mucho tiempo. Hay que reconocer que todos estamos cansados de mal tiempo, y la Semana Santa nos ha traído buen tiempo de momento, y la gente se ha echado a la calle sin pensárselo, porque hay ganas de comer en la calle, disfrutar, pasar el fin de semana sin hacer nada...”.
Los establecimientos hosteleros han contado con previsiones que cumplían las expectativas previstas, de hasta 75/80% de lleno, cifras que son mayores conforme se acerca el fin de semana. “Y es que, parece que la gente del centro y el norte de la península también está un poco cansada de tanto mal tiempo y vienen huyendo hacia el sur, algo que nos beneficia, a pesar de que ciudades como El Puerto no ha salido bien parado del temporal”, indican desde un hotel.
En otro establecimiento hostelero apuntan que “ha llamado gente diciendo que le daba igual si hacía mejor o peor tiempo, porque querían venir al sur porque las temperaturas siempre son más agradables”, de ahí las cifras que manejan por el momento, pero que van a ir ascendiendo.
El centro de la ciudad está exultante, y según explican los hosteleros, “hemos tenido suerte porque el Domingo de Ramos no solo hemos tenido lleno, sino gente esperando a poder sentarse en una mesa, y eso es de agradecer, sobre todo cuando estamos acostumbrados a que, otros años, desde febrero, si hay días buenos, la gente sale a la calle, y en cambio este año ha sido desastroso con tanto día malo”.
A los locales de comida le han ido a la zaga los dedicados al postre, café y copa, porque igualmente “la gente se ha quedado en la calle para esperar las procesiones, porque el tiempo ha acompañado”, como ha ocurrido desde principios de semana, que “la gente se sienta a tomar el café antes o durante las procesiones”, y eso hace que las ventas estén siendo favorables, lo que hace que pensar en el verano se haga con positivismo.
Y además, los puestos ambulantes de venta de todo tipo de souvenirs y complementos relacionados con la Semana Santa también experimentan unos resultados positivos. Según explican, la Semana Santa ha comenzado muy bien, “esperemos que no se estropee con la llegada del mal tiempo, que por lo que se ve llegará con el fin de semana”, añaden. Y es que, portuenses y visitantes “al final pican y compran unas pipas, unas golosinas, un tambor para el niño, y eso es algo que nos da vida. Aunque parece un goteo de ventas, al final si sumamos un poco de aquí y un poco de allí, nos da para poder continuar”.
En cambio, ha habido una queja de un local del centro debido a que aseguran que el Ayuntamiento, el año próximo, les suben los impuestos relacionados con las terrazas que colocan en la calle de algo más de 300 euros a más de 900, lo que hace no solo que se indignen sino que hayan conseguido, a raíz de mostrar sus quejas a través de redes sociales, bastante apoyo ciudadano, que entiende que es “un robo”, porque no se “pueden poner tantas trabas a los empresarios que quieren aumentar sus ventas y dar mejor servicio”, y además, crear empleo, ya que con sus terrazas, en esta semana, pueden aumentar la plantilla en varias personas. Por tanto, si el equipo de Gobierno no cambia su propuesta, parece que el año próximo no pondrán terraza, que insisten en que es solo para aumentar y mejorar el servicio al portuense y al visitante.
En general, parece que el pesimismo de estos meses de mal tiempo está tornando, no solo en los propios ciudadanos, sino en los empresarios y en su visión de las ganancias que puede reportar la Semana Santa.
Los chiringuitos afectados siguen su puesta a punto
Los chiringuitos afectados por el temporal continúan con su puesta a punto, y a pesar de las carreras que están dando los empresarios, parece que esta Semana Santa será difícil que puedan abrirse al público. La meta será la época estival.
La fortaleza de La Muralla se sigue cayendo
A pesar de que el Gobierno local indica que La Muralla no se cae, solo eran desprendimientos anteriores, si se comparan imágenes se puede percibir cómo hay partes de la fortaleza que se han ido desprendiendo con los últimos temporales.
La gente, ávida de sol, se marcha a la playa
Las temperaturas están acompañando, por eso la mayor parte de ciudadanos y visitantes están llenando las playas, puesto que tienen ganas de sol y de disfrutar de uno de los mayores atractivos de esta ciudad, y que llama la atención de los de fuera.
Hay playas que aún no están a punto
Hay playas que aún no se han podido poner a punto, a pesar de que el equipo de Gobierno ha indicado que está haciendo esfuerzos para que la costa pueda volver a disfrutarse lo antes posible. Así, La Calita permanece sin escalera y algunos accesos, cortados.
