En esta ocasión la entidad denuncia públicamente “al alcalde, Tomás Herrera, como máximo responsable por no aplicar el artículo sexto, Derechos y deberes de los propietarios de inmuebles catalogados, punto sexto del deber de conservación del Catálogo de Conjunto, Elementos, Sitios y Bienes de Especial Protección del Plan General Municipal de Ordenación aprobado en el año 2002”.
La Trocha recuerda que este artículo señala que “se prohíben toda clase de usos indebidos, anuncios, carteles, cables, postes, marquesinas o elementos superpuestos y ajenos a los edificios catalogados”. En este sentido, la normativa aclaraba que todo elemento ajeno al inmueble “deberá suprimirse en un plazo de un año desde la aprobación de las presentes Normas y su Catálogo”.
Debido a esta adecuación, “los propietarios de locales o de los inmuebles, y las compañías concesionarias de líneas de teléfonos o de electricidad, deberán retirar, demoler o instalar subterráneos dichos aditamentos”.
La entidad subraya que “desde hace años venimos denunciando esta situación en las comisiones de Patrimonio, alegando el concejal delegado, Gabriel Orihuela, ignorancia y que lo estudiará”.
Como ejemplo, La Trocha se refiere al caso de la casa ubicada en la Plaza Alta esquina con calle Joaquín Costa, ficha del catálogo 3.04, catalogada en el grado tres, dentro de Otros edificios de interés arquitectónico.
A esta edificación se sumarían también el incumplimiento en otra casa situada en la calle Ventura Morón y calle Teniente García de la Torre, ficha del catálogo 2.05, catalogada en el grado dos, dentro de Edificios de notable interés arquitectónico y/o histórico.
Pérdida patrimonial
La Trocha ha denunciado en incontables ocasiones que el 70% del patrimonio catalogado en un informe del año 1989 “se ha perdido ya”. Además, la entidad afirma que “si no se toman medidas urgentes y se reparan, este porcentaje ascenderá hasta el 100%, según un estudio realizado”. En esta línea, desde La Trocha se subraya que “del último catálogo patrimonial realizado en el año 2000, el 60% está ya desaparecido o a punto de hacerlo”.
Según su presidente, Manuel Correro, la máxima responsabilidad por esta deficiencia recaería sobre el alcalde. En cuanto a la respuesta del Ayuntamiento a sus peticiones, Correro señala que “hemos hablado con Orihuela, pero indica que no dispone de presupuesto. Por eso la responsabilidad última la tiene Herrera”.
Entre otros ejemplos, la entidad resaltó la mala situación en la que se encuentran la Casa Millán o la Suit de las Cortinas. A esto se une la “dejadez” del “patio de vecinos de la calle Álferez Villalta”.
