La asociación Calor en la Noche presentaba este martes a la prensa el local que albergará una iniciativa pionera en la ciudad y que posibilitará que se dé el desayuno a los sintecho de la ciudad. Unas instalaciones que fueron cedidas por el Ayuntamiento de Cádiz, al que la agradeció el gesto y donde antiguamente se acogía al Servicio Integral de Atención Municipal al Inquilino (Siami). Ahora, acoge material para aquellos que no tienen un hogar, máquinas de cocina, mesas y sillas, así como alimentos que pronto se repartirán entre más de una veintena de sintecho de la ciudad. Está previsto que cada turno albergue unas 24 personas, y que se habiliten entre dos y tres turnos.
Dentro de la programación de Calor en la Noche está ofrecer estos desayunos de lunes a domingo. En cada uno de los turnos habrá cuatro personas, por lo que se alcanza la colaboración de unos 40 voluntarios. “Ya tenemos cubiertos los turnos y contamos con suplentes por si hubiera cualquier incidencia”, matizó el presidente de la asociación, Manuel Mení.
Tostadas, mantequilla, aceite, mermelada y leche compondrán un desayuno que dentro de poco comenzará a repartirse. Para ello, Calor en la Noche está a la espera de recibir los carnés de manipulador que deben tener los voluntarios que ayuden a la asociación a repartir los desayunos.
Mañana mismo, el colectivo tiene previsto llevar a cabo una jornada de puertas abiertas entre las once y las doce entre el colectivo de personas sin hogar. Manuel Mení confía en que para primeros del mes de octubre comiencen a funcionar y a dar los desayunos. El horario previsto será de 9 a diez y media de la mañana.
Asimismo, desde la asociación tienen previsto ofrecer asistencia médica, con la colaboración del médico internista Fernando Carmona. Para ello, en estas instalaciones, habrá una especie de consulta médica con horario de mañana o tarde. Otro de los objetivos que se ha marcado la asociación es llevar a cabo talleres formativos para ofrecer alternativas lúdicas a los sintecho de la ciudad.
Mení agradeció la colaboración de las cofradías, como la del Medinaceli, que aporta ocho euros por menú. Dio las gracias al Ayuntamiento, a la empresa Catunambú, así como a la peña La Estrella entre otros solidarios de la ciudad.
La asociación tiene como misión buscar la “integración personal del sintecho, que se sientan
acompañados, darles la esperanza que no tienen”, un objetivo que se plantean desde La Salle. Calor en la Noche funciona a base de aportaciones, muchas de las cuales sorprenden a sus integrantes, como son “2.000 euros que llegaron desde Holanda, o la ayuda de 700 euros de una trabajadora de Diputación para comprar comida”, así como muchas personas “anónimas” que buscan el bien de las personas sin hogar.
La labor que desempeña este colectivo ya tiene proyección en municipios de la provincia como son San Fernando y El Puerto. Ahora, a finales de semana irán a Sanlúcar para “avanzar”.
Mientras tanto, en Cádiz, se contabiliza alrededor de una veintena de sintecho que llevan ya muchos años en la capital. Por eso, desde Calor en la Noche se insiste en que “vamos a seguir contando con ellos. Ya están representados en la Mesa de Exclusión Social, tienen una mayor participación. Queremos que tengan voz y voto”.
