La construcción del telescopio, que tendrá 30 metros, no ha estado exenta de polémica ya que los nativos consideraban que sería profanar el Mauna Kea y los ecologistas han advertido que podría dañar a un tipo de insecto local (Nysius wekiuicola) que vive en eta montaña.
La Universidad indicó en un comunicado que antes de dar la aprobación al proyecto hicieron un estudio de impacto ambiental, que fue aceptado por la Gobernadora de Hawai, Linda Lingle.
El proyecto pasará ahora al Departamento de Tierras y Recursos Naturales que tendrá que ratificar el permiso para construir el telescopio.
“Este telescopio nos llevará a un emocionante viaje de descubrimientos astronómicos” dijo el presidente de la institución MRC Greenwood, quien subrayó que “los beneficios que se derivarán del proyecto van mucho más allá de los resultados científicos”.
En este sentido destacó que la inversión de capital y la creación de trabajo que generará el telescopio Thirty Meter Telescope (TMT, por sus siglas en inglés) serán beneficiosos para la isla. Greenwood se mostró consciente “de la importante responsabilidad de la universidad para garantizar el uso adecuado de este sitio especial, para las generaciones futuras”.
Asimismo, reiteró que el cuidado del lugar ha sido un punto de “máxima prioridad” en todo el proceso y “seguirá siendo a medida que trabajamos en estrecha colaboración con la comunidad y todos los actores involucrados en la gestión del Mauna Kea”. El Mauna Kea, cuyo significado es montaña blanca, es uno de los cinco volcanes que forman el archipiélago de Hawai.