El avión sirio interceptado el pasado miércoles por las autoridades turcas ante la sospecha de que transportaba mercancía militar, llevaba componentes técnicos de radares de defensa antiaérea, según han informado diversas fuentes al diario ruso 'Kommersant'.
Las fuentes han explicado que este tipo de mercancía, a pesar de ser de naturaleza militar, no requiere una notificación especial a las autoridades de aviación civil, de acuerdo con la agencia de noticias RIA Novosti.
Esta información contrasta con lo afirmado por el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, que ha aseverado que el avión sirio transportaba municiones de fabricación rusa destinadas al Ministerio de Defensa de Siria.
Los medios de comunicación del país euroasiático, por su parte, ya habían apuntado horas antes que el avión sirio transportaba equipos de comunicación militares y lo que podrían ser componentes de misiles.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia ha pedido una explicación a las autoridades turcas por la interceptación del avión sirio, ya que en él viajaban 17 ciudadanos rusos, así como que se tomen medidas para evitar que se produzca otro incidente similar.
"La vida y la seguridad de los pasajeros corrieron peligro", ha dicho el portavoz de la Cancillería, Alexander Lukashevich, añadiendo que ni los diplomáticos ni los médicos rusos pudieron subir al avión sirio para atender a sus compatriotas.
El avión, un Airbus 320 de la aerolínea estatal siria, se encontraba haciendo escala en Ankara en su camino de Moscú a Damasco, cuando fue interceptado por un grupo de cazas F-16 de la Fuerza Aérea de Turquía, tras recibir información de Inteligencia que apuntaba a que llevaba una mercancía sospechosa.