Henry Kissinger, secretario de Estado en la época, ordenó en 1976 la elaboración de planes de contingencia para llevar a cabo bombardeos aéreos con los que "golpear a Cuba" en represalia por la intervención de la isla en Angola, según han revelado nuevos documentos gubernamentales recogidos por el diario 'New York Times'.
Estos documentos, procedentes de la Biblioteca Presidencial de Gerald Ford y publicados a petición del grupo de investigación National Security Archive, revelan que Kissinger estaba tan enfadado con la actuación de Fidel Castro que pidió a un grupo de altos cargos en secreto la elaboración de posibles medidas de represalia en caso de que Cuba interviniera en otro país africano.
Los planes elaborados planteaban bombardear puertos e instalaciones militares en Cuba y enviar batallones de marines a la base de Guantánamo, que Estados Unidos tiene en la isla, para "aplastar" a los cubanos, en palabras del propio Kissinger, que temía que Washington pareciera débil si no plantaba cara al régimen comunista.
"Creo que antes o después vamos a tener que golpear a los cubanos", le dijo Kissinger al presidente Ford en una reunión en el Despacho Oval en 1976, de acuerdo con la transcripción del encuentro dada a conocer ahora.
Según explica el diario, los documentos han sido incluidos en el libro 'Back channel to Cuba' elaborado por los expertos en la isla William M. LeoGrande, profesor de la Universidad Americana, y Peter Kornbluh, director del archivo del Proyecto de Documentación sobre Cuba.
ACERCAMIENTO A CUBA
Al parecer, Kissinger, que fue secretario de Estado entre 1973 y 1977, trató de llevar a cabo esfuerzos encubiertos para mejorar las relaciones con Cuba, muy deterioradas desde la Revolución de 1959, pero la decisión de Castro de apoyar a Angola con el envío de tropas dio al traste con estos planes.
"Nadie ha sabido que al final de un esfuerzo realmente destacable para normalizar las relaciones, KissiNger, el jugador global de ajedrez, se sintió insultado porque un pequeño país arruinara sus planes para África y estuvo dispuesto a poner la fuerza imperial de Estados Unidos sobre la cabeza de Fidel Castro", ha explicado Kornbluh.
Los planes sugieren que Kissinger estaba preparado a recomendar, tras las elecciones presidenciales de 1976, atacar a Cuba, pero la idea no llegó a ninguna parte ya que ganó Jimmy, ha señalado LeoGrande, que ha incidido en que "estos no eran planes para dejarlos en una estantería".
"Kissinger está tan enfadado por el hecho de que Castro haya enviado tropas a Angola en un momento en el que él estaba tendiendo la mano para la normalización que realmente quiere, como él dijo, 'aplastar al mocoso'", ha precisado.
BOMBARDEOS AÉREOS
Según revelan los documentos, el plan sugería enviar decenas de aviones a bombardear los puertos cubanos y advertía de que Estados Unidos podría correr el riesgo de perder su base en Cuba. Asimismo, contemplaba propuestas para imponer un bloqueo militar sobre las costas de Cuba y se advertía de que estos pasos podrían generar un conflicto con la Unión Soviética.
"Si decidimos usar la potencia militar, debemos tener éxito", defendió Kissinger en una reunión, en la que los asesores le advirtieron sobre las posibles filtraciones. "No debería haber medidas de media tinta: no conseguiremos ningún premio si usamos la fuerza militar en moderación. Si nos decidimos por el bloqueo, debe ser despiadado, rápido y eficiente", advirtió.
Según el 'New York Times', los documentos revelan que Donald Rumsfeld, secretario de Defensa entre 1975 y 1975, estaba presente en la reunión en la que Kissinger ordenó la elaboración de los planes de contingencia. Ninguno de los dos han querido hacer comentarios sobre esta información al diario.