La última jornada de conciertos del decimoquinto FIB Heineken, que según los cálculos de la organización ha sido presenciado desde el jueves por 200.000 personas en total, será recordada por el lleno absoluto logrado en el Escenario Verde por la banda de Las Vegas que lidera Brandon Flowers como vocalista y hombre-espectáculo, o como el Spaceman de uno de sus temas más coreados ayer.
Sin embargo, el inicio del concierto, con Human –su canción más emblemática y descargada–, reflejó la constante de la noche: carreras por todo el recinto de conciertos para llegar a tiempo al recital deseado.
La razón estaba en el caos que se había generado por el adelanto generalizado de prácticamente todos los conciertos de los cuatro escenarios.